James Bond 007: NightFire es una digna secuela del excepcional Agent Under Fire de 2001. El juego conserva la estética general de su predecesor, incluyendo algunos personajes y dispositivos recurrentes conocidos, pero está diseñado para parecerse más a una película de Bond que a un videojuego. Tras la conocida escena inicial con el cañón de la pistola, se introduce al juego a través de una secuencia de acción precréditos por las calles de París que da paso a una canción original, con imágenes surrealistas.

El ritmo del juego es natural, y cada objetivo conduce fluidamente al siguiente. Incluso podrás enfundar tu PPK, ponerte un esmoquin e infiltrarte en un cóctel en la mansión de tu adversario, charlando con sus secuaces, coqueteando con las invitadas y escuchando a escondidas conversaciones secretas. Por supuesto, en cuestión de minutos estarás disparando para escapar del lugar y realizar una audaz huida al más puro estilo 007, incluyendo las frases ingeniosas características de Bond. La trama combina espionaje, acción e insinuaciones en la proporción perfecta para evocar la atmósfera de una auténtica película de Bond.

La jugabilidad general del juego mejora gracias a una cuidada atención al detalle, entre la que destaca la incorporación de villanos más inteligentes y menos predecibles (pueden oírte venir, se comunican entre sí y son más hábiles a la hora de cubrirse y escabullirse por detrás). También dispones de más opciones tácticas (hay muchas maneras de alcanzar cada objetivo, lo que hace que el juego sea muy rejugable), así como de un mejor arsenal de dispositivos y armas. Y lo mejor de todo, el modo multijugador incorpora personajes clásicos de muchas películas de Bond. Más que cualquier otro juego de 007 hasta la fecha, NightFire se diseñó pensando claramente en el fanático incondicional de Bond. Caja abierta.